REFLEXIÓN FINAL

Al comenzar estas prácticas, no conocía el centro, es decir, yo sabía que existía pero no sabía su funcionamiento ni su amplitud.

Esta experiencia me ha ayudado a darme cuenta de la calidad que tiene. Entre todos los integrantes del centro hay muy buena convivencia y organización y pienso que para un centro con este número de alumnos es muy importante para su buen funcionamiento. Para poder mantener y mejorar el centro, los profesores realizan cursos en los que amplían conocimientos sobre temas demandados por el centro, padres y alumnos. Este interés por mejorar creo que se ve recompensado en los alumnos y sus aprendizajes y hace que el centro tenga mayor calidad de enseñanza.

Durante mi estancia en el centro, pude llevar a cabo muchas de las actividades que previamente había programado en una unidad didáctica para este aula. El realizar unas actividades y poder llevarlas a cabo te da mucha satisfacción, sobre todo en el momento en que ves que salen bien, y que las has programado correctamente y acordes a las posibilidades de los niños, ya que puede ser que pensemos que una actividad es adecuada para un tipo de alumnos, y luego al llevarla a cabo veamos que no se entiende o que no es apropiada para esa edad. Por todo ello considero que esta actividad en este prácticum es fundamental para avanzar en nuestro aprendizaje como futuros maestros.

Los niños que he encontrado en mi clase tienen un buen aprendizaje, me sorprendió todo lo que sabían, siendo tan pequeños (3 y 4 años). Aunque sí es verdad, que se nota aquellos con los que los padres trabajan en casa. Por lo que creo que la atención de los padres en las actividades de sus hijos es muy importante. Pienso que se debe tener una educación paralela con la escuela, no dejar la responsabilidad a la escuela, puesto que no es sólo competencia suya.

He podido observar la importancia de las asambleas para darnos cuenta de muchas de las cosas de los alumnos. Es un momento en el que nos cuentan las relaciones con su familia, sus actividades fuera del cole…y hay que aprovecharlo para darnos cuenta de esas relaciones.

He tenido oportunidad de trabajar con los padres en los talleres que se realizaron algunos viernes. En estos momentos, los niños están muy nerviosos y a la vez motivados para realizar la práctica programada. Es un momento que rompe con la rutina y que opino que viene bien para su interés en las próximas actividades. Creo que el buen trato con los padres es muy importante, puesto que como ya he introducido antes, la educación de sus hijos es algo conjunto entre ellos y el colegio y se tiene que ver como algo común y no como una educación separada.

Estoy muy contenta con las prácticas. Tanto los niños como la profesora eran estupendos y por el trato que recibí de ambos yo me sentí como un miembro más de esa clase desde el primer día. El que se haya terminado este período me ha dado mucha pena, pero por otra parte pienso que así queda menos para que un día pueda ejercer de ello y sea algo que no termine.

Pueden haber surgido en algunos momentos situaciones incómodas (normalmente por no saber qué hacer en determinado momento) pero esto ha sido claramente superado por la cantidad de buenos momentos que he pasado en esta clase. Dentro del aula se viven situaciones positivas pero también negativas. Creo que ambas sirven para el aprendizaje y formación, luego dependerá de cada uno canalizar éstas experiencias de un modo u otro.

Acudir a prácticas supone observar la verdadera realidad escolar y situaciones reales. Con ellas me he reafirmado en la decisión que tomé en su momento de estudiar esta carrera, ha sido una experiencia que me ha encantado y que me gustaría que dentro de poco pueda llevar a cabo.